El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, Jaime Lissavetzky, y el secretario general del grupo municipal socialista, Diego Cruz, han presentado en rueda de prensa sus enmiendas al Reglamento Orgánico de los Distritos de la Ciudad de Madrid.
“Queremos que aumente la participación ciudadana”, ha manifestado Lissavetzky y es en ese sentido en el que van a plantear al PP modificaciones en el funcionamiento de las Juntas de Distrito, “para que tengan más recursos y más competencias”.
Entiende el portavoz del PSOE que “al PP y Ana Botella les da miedo la participación, creen que porque el Palacio de Cibeles es lujoso pueden manejar la ciudad desde allí”.
Recuerda el líder de la oposición municipal que “las Juntas son como pequeños parlamentos para gobernar distritos que, en muchos casos, son más grandes que la mayoría de las ciudades españolas. Para que eso funcione hay que descentralizar, que es lo contrario de lo que ha hecho este gobierno desde Gallardón hasta ahora”.
Así, ha subrayado que en 2003, cuando el alcalde era Álvarez del Manzano, los recursos que gestionaban las Juntas alcanzaba el 19,2% y que en 2012 solo llega al 11,3%. “Nosotros pedimos que se incremente hasta el 20%”, explica Lissavetzky, quien asegura que “tal como están ahora, las Juntas son prácticamente ventanillas donde se pueden presentar peticiones del oyente”. Y añade que “los presidentes no tienen ninguna función relevante, los gerentes les han quitado el papel político que tenían”.
Los socialistas insisten en pedir que los Plenos en los distritos vuelvan a celebrarse por la tarde, de modo que los vecinos puedan acudir a ellos y plantear allí sus reivindicaciones. También apuestan por la transparencia, a través, por ejemplo, de las páginas webs de los distritos. “El PP no quiere que haya participación. Está ahogando la voz de los vecinos”, concluye Lissavetzky.
Diego Cruz, por su parte, ha puesto en cuestión los argumentos usados por el gobierno municipal para que los Plenos de las Juntas se lleven a cabo en horario de tarde. “Nos han dicho que es para ahorrar dinero y para que se pueda conciliar vida laboral y familiar. Lo segundo, cada uno lo hace como mejor puede. Pero lo primero, es un chiste. El ahorro en un distrito como, por ejemplo, Chamberí, alcanza los 400 euros al año, o sea, 33 euros al mes, 1,10 euros al día. Es ridículo. Nosotros creemos que es mejor gobernar con los ciudadanos que para los ciudadanos”, ha declarado el secretario general del grupo municipal socialista.
