El ruido de los petardos, más intoxicaciones etílicas y un aumento de las agresiones es el balance de la Nochebuena de 2017. Según los datos de la Policía Municipal de la capital, el cuerpo atendió entre las 23:00 horas del domingo 24 de diciembre y las 7:00 horas del día siguiente un total de 705 llamadas, de las cuales 63 fueron por las molestias generadas por petardos. El dato reseñable es que los agentes locales no tuvieron que desalojar ningún establecimiento por exceso de aforo, “desarrollándose la velada con normalidad y sin incidentes destacados”.
Asimismo, el informe de Samur Protección Civil también detalla las intervenciones realizadas por los efectivos que componen el cuerpo durante la Nochebuena. Los sanitarios asistieron un total de 103 intervenciones en el conjunto de la ciudad, destacando 18 intoxicaciones etílicas y 25 por agresiones. Sin embargo, los sucesos más graves fueron un accidente de moto a la altura del número 294 de la calle Alcalá, y que terminó con una mujer de 28 años herida grave; y también la caída de un ascensor con una familia de cuatro miembros en su interior.
Con respecto a las intervenciones por intoxicación etílica (18) en la capital, la cifra supone ocho casos más en relación con la Nochebuena de 2016. Por otro lado, también se produjeron 25 casos de agresiones y reyertas, que también suben con relación al año pasado (16). En el conjunto de la Nochebuena, los bomberos de la capital realizaron un total de 35 intervenciones (frente a las 27 del año pasado), casi todas de poca relevancia.
Así, se han producido seis intervenciones por incendios de contenedores (9 en 2016), siete rescates en ascensor (en contraposición con los cinco casos del año pasado), seis fuegos menores en viviendas de la ciudad (se produjeron tres en Nochebuena de 2016) y cinco fugas de agua en el interior de viviendas.
