La crisis de Podemos con Íñigo Errejón y la elección de Pepu Hernández como candidato del PSOE -si bien deberá superar un proceso de primarias- han copado los titulares informativos en cuanto a comicios se refiere. La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, se ha propuesto cerrar la semana anunciando también un fichaje, el de Félix López Rey, un histórico del movimiento vecinal. «Si sigo es si Félix López Rey viene conmigo al Ayuntamiento», declaraba la alcaldesa; «si soy útil, vamos», respondía el activista.
Estas palabras entre la candidata a la reelección y su acompañante adquirieron cierto morbo político: se da la circunstancia de que López Rey ha sido uno de los vecinos más críticos y beligerantes con la gestión llevada a cabo por la todavía concejal de Carmena en los distritos de Usera y Arganzuela, Rommy Arce. La elección del activista continúa con la estrategia de la actual mandataria de marcar distancias con una de las ediles que más quebraderos de cabeza le ha ocasionado en la legislatura.
Y es que Arce, además de ser una de las voces más críticas con la deriva tomada por Ahora Madrid, ha protagonizado numerosos desencuentros con funcionarios públicos -la publicación de tuits poniendo en entredicho la actuación policial en el marco de la trágica muerte de un mantero en Lavapiés-, representantes políticos -fue reprobada en Pleno por la bancada de la oposición- y vecinos -la propia alcaldesa le llegó a recriminar en público que debía atender mejor las demandas de los distritos que gestionaba-.
Ahora, Manuela Carmena pretende suplir todas esas idas y venidas experimentadas con la concejal presidenta de Arganzuela y Usera con un perfil próximo al día a día en el barrio. En este contexto, señalar que Félix López Rey fundó en 1970 la Asociación de Vecinos de Orcasitas, además de ayudar a la creación de la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM); también ejerció como concejal por IU entre 1987 y 1999. Carmena ha defendido al proponer a López Rey que la lista de Más Madrid no puede limitarse a ser una “acumulación de siglas”, sino que lo primordial es que esté constituida por personas “eficientes y eficaces”.
