El Grupo Municipal Socialista de Villa de Vallecas presentó una iniciativa en el último pleno del distrito solicitando que la Junta Municipal amplíe el número de licencias que concede para instalar puestos en el mercadillo en vía pública de Sierra Gorda. Con esta proposición, los socialistas pretendían que la Junta Municipal, pese a no contar inicialmente con las competencias en materia de empleo, hiciera todo lo posible para facilitar a un determinado número de familias una salida laboral en una situación económica tan grave como la actual.
Ignacio Benito, portavoz del grupo socialista, defendió en su intervención "la necesidad de que la Junta Municipal utilice sus limitados recursos en esta materia para fomentar la actividad económica y, de este modo, la creación de un determinado número de empleos". Benito argumentó que "con un único puesto de trabajo que se pudiera generar y que permitiera aliviar la difícil situación económica de una familia, ya habría merecido la pena el esfuerzo".
La proposición, que contó con el apoyo de UPyD e Izquierda Unida, fue rechazada por la mayoría del Partido Popular. En este sentido, los socialistas de Villa de Vallecas criticaron “la falta de voluntad política para ponerse de acuerdo en una cuestión tan importante como ésta, algo que perjudica a los ciudadanos madrileños y además contraviene el propio programa electoral de los populares”.
Para el gobierno municipal en el Distrito Villa de Vallecas la idea de ampliar el número de puestos de venta ambulante en el mercadillo municipal de la calle Sierra Gorda “no es más que un brindis al sol, que no se corresponde con un estudio serio y en profundidad de la situación real del comercio en el Distrito Villa de Vallecas”.
“Pérdida de empleos”
El equipo de gobierno tuvo que rechazar esta moción “porque ni el PSOE ni nadie puede asegurar que una decisión así pudiera servir para generar nuevos empleos en el distrito, incluso al contrario, podría significar la pérdida de los que ya existen tanto en el mercadillo municipal, como en el resto del tejido comercial no ambulante. En este sentido apuntaron a que “no está muy claro que este tipo de iniciativas no aumentara la posibilidad de que se cerraran comercios del distrito”.
La venta ambulante que hay, tiene cierto arraigo y funciona bastante bien, “pero al contrario de lo que pueda parecer, es muy sensible, e incluso también está pasando muchas dificultades”, argumentan desde la Junta.
Actualmente, la ley de la venta ambulante de la Comunidad de Madrid y la Ordenanza Reguladora municipal correspondiente, “tratan de mantener un cierto equilibrio entre la venta ambulante y la venta tradicional en locales, además de propiciar profesionalidad, especialización y una salvaguarda de garantías para todo el que quiera dedicarse al comercio”, explican el gobierno municipal.
El mercadillo de Villa de Vallecas, aseguran desde la Junta, cumple con la ordenanza municipal y con la legislación regional al respecto. Por tanto, “aumentar ahora el número de puestos podría conllevar un incumplimiento de las normativas vigentes, un traslado o una nueva redistribución del mismo lo que podría ser perjudicial para un sector ya de por sí muy sensible a los cambios”, añaden.
“Donde no hay problemas es mejor no generarlos. Potenciar el mercado ambulante podría implicar también un perjuicio a la venta en establecimiento. No es bueno generar desequilibrios adicionales donde no las hay con ideas poco fundamentadas”, concluyen desde la Junta Municipal.
