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El Ayuntamiento de Getafe aprueba solicitar el cierre de la incineradora de Valdemingómez

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Getafe es, junto a Rivas-Vaciamadrid y Madrid, el municipio más afectado por las emisiones contaminantes de la incineradora del Parque Tecnológico de Valdemingómez. Se calcula que su nube tóxica alcanza un radio de 10 kilómetros desde el complejo de residuos, afectando a la salud de unas 700.000 personas, entre ellas, los 12.000 vecinos y vecinas que residen en el barrio getafense de Perales del Río.

 Preocupadas por esta realidad, el pasado 16 de marzo todas las agrupaciones políticas con representación municipal aprobaron de manera unánime en el pleno del Ayuntamiento solicitar el cierre de la incineradora o, dicho de otra manera, la no renovación de su contrato de gestión, que finaliza en 2020.

La corporación envió hace unos días a la Alianza Incineradora Valdemingómez No, de la que forma parte la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM) y Ecologistas en Acción, la resolución del pleno, que literalmente apoya el manifiesto fundacional de la Alianza y que lleva por título «La incineradora de Valdemingómez no puede seguir treinta años más». La propuesta fue presentada por los grupos municipales IUCM-Los Verdes, PSOE y Ahora Getafe.

Tras repasar los peligros que representan para la salud las emanaciones de la incineración de residuos, como el incremento del riesgo de contraer enfermedades graves (diversos tipos de cáncer), y dar cuenta de los datos de la actividad de la planta de Valdemingómez, el manifiesto solicita la realización de un «estudio epidemiológico de las poblaciones, particularmente Madrid, Rivas-Vaciamadrid y Getafe que habite o trabaje en las proximidades de la incineradora, con objeto de determinar los posibles daños en la salud producidos por las emisiones del Complejo de Valdemingómez».

Además, el texto promueve «la implantación de métodos de tratamiento de residuos que sustituyan a los incineración y vertedero por otros basados en la reducción de residuos, la reutilización y el alargamiento de los productos y el reciclaje». En este marco, apuesta por impulsar la «recogida separada de la materia orgánica compostable, que no se realiza en casi ningún municipio de la Comunidad de Madrid, incumpliendo la legislación europea».

En definitiva, la Alianza, con el apoyo del Ayuntamiento de Getafe, además de oponerse a la «implantación de nuevas incineradoras de residuos», exige la puesta en marcha de planes de recogida de residuos más sostenibles, «con la celeridad suficiente para asegurar que no se renueva el contrato del Ayuntamiento de Madrid con la empresa gestora de la incineradora y se cierre esta antes del vencimiento de dicho contrato».

Como no podía ser menos, la resolución del Ayuntamiento de Getafe ha sido muy bien recibida por los colectivos de la Alianza, entre los que se encuentran AMPAs, plataformas en defensa de la sanidad, sindicatos y colectivos vecinales y ecologistas. Tras una concurrida manifestación por el cierre de la incineradora de Valdemingómez que tuvo lugar el pasado 3 de febrero en Villa de Vallecas, uno de los distritos capitalinos más afectados por sus malos humos, la Alianza continúa su campaña informativa y de sensibilización, así como la recogida de apoyos a una propuesta inscrita en el portal Decide Madrid que tiene como objeto la organización de una votación ciudadana en Madrid sobre la continuidad de la instalación contaminante.

 

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