Indignación en el gremio de los joyeros por la paliza recibida a uno de sus miembros a manos de una banda de atracadores que entró a robar en su establecimiento de la calle de Chile en Chamartín. La víctima, un joyero de 65 años.
Julio Díaz, así se llama el joyero de Chamberí, se encuentra herido grave tras el brutal atraco que sufrió en su local el sábado al mediodía. Dos hombres encapuchados y armados entraron en la joyería de la calle Chile y le propinaron una paliza para robar.
Julio salió corriendo detrás de ellos. Se llevaron tres estuches con joyas. Los delincuentes huyeron en dirección prohibida. El coche robado apareció quemado en San Fernando de Henares.