El portavoz del grupo municipal socialista, Jaime Lissavetzy, antes de comenzar el Pleno del Ayuntamiento correspondiente al mes de enero, ha señalado que “el caso semáforos se está extendiendo en Madrid como una mancha cada vez más grande”.
El edil hacía alusión al supuesto uso privado de vehículos llevado a cabo por algunos funcionarios municipales y la posible implicación en el caso de responsables políticos afines al gobierno de la ciudad; el coordinador general de Economía, Javier Conde, entre otros.
Lissavetzky ha reiterado la intención de su grupo de pedir una comisión de investigación municipal. “Llegaremos hasta el final –anunció-. Incluso elevaremos sus resoluciones a la Fiscalía”. También ha pedido que se planteen medidas “que puedan llevar de forma preventiva a la separación del servicio de aquellas personas que están presuntamente implicadas”.