«Madrid está en una situación de crisis profunda en cuanto al tema de refugiados; es una ciudad de acogida, pero no damos más de sí», ha advertido Aniorte tras una reunión con vecinos de la Cañada Real. Ha explicado que la capital (en concreto el aeropuerto) es la puerta de entrada de la mayor parte de las personas que buscan asilo en España, y ha subrayado que este año han llegado hasta Madrid prácticamente el doble de refugiados en el pasado año.
Porque si en todo 2018 llegaron 20.500 personas, en lo que va de 2019 ya suman 35.000, lo que hace prever que se superarán las 40.000 hasta diciembre. La situación es tal, ha seguido diciendo, que las plazas de atención que el Ayuntamiento destina a la campaña del frío, que históricamente se abren a finales de noviembre, ya fueron abiertas hace semanas «y tardaron 5 días en llenarse». «El Ayuntamiento no tiene más plazas, no tenemos capacidad de albergar a más personas, es una situación de crisis muy importante», ha insistido.
Aniorte ha recordado que quien tiene competencia sobre las personas que buscan asilo es el Gobierno central, pero en vista de la grave situación el Ayuntamiento quiere «liderar la solución» y para ello ha convocado para el próximo martes una reunión con los dos Ministerios implicados (Interior y Trabajo y Migraciones) y con la Comunidad de Madrid para avanzar en un plan que lo resuelva. Un encuentro del que espera resultados, como la derivación de personas, solicitantes de asilo o refugio a otras comunidades o ayuntamientos, que espera que se pueda concretar a partir del martes.
