Ana Botella iniciará el próximo día 12 un proceso de liberalización gradual de los aparcamientos subterráneos que permitirá a quienes tienen una plaza en régimen de concesión adquirirla en propiedad y después venderla, alquilarla, transmitirla o compartirla.
Lo ha anunciado en el debate sobre el estado de la ciudad, aunque el Ayuntamiento lleva trabajando en esta idea desde que Ana Botella, entonces delegada de Medio Ambiente y Movilidad, encargó los primeros estudios en 2011. La liberalización de las plazas de los aparcamientos subterráneos del Ayuntamiento será gradual, voluntaria y se adaptará en todo momento a la demanda de plazas existente y a la normativa en vigor, según ha asegurado la alcaldesa.En una primera fase, el Ayuntamiento impulsará la desafectación de las plazas para que dejen de ser consideradas dominio público y pasen a ser bienes patrimoniales. Posteriormente se procederá a la enajenación, siempre en función de la demanda y la iniciativa del residente, de modo que si éste no quisiera adquirir la propiedad de la plaza continuaría en su actual régimen concesional, con sus mismas condiciones, hasta el fin de la concesión.