Según las previsiones, los trabajos del paso subterráneo deberían finalizar la próxima semana, aunque todo depende de las actuaciones de la entidad ferroviaria pública, que por el momento estudia el tratamiento de protección contra la corrosión de las vigas que sostienen la playa de vías.
A esto se suman las labores de impermeabilización de la playa de vías y andenes, con el objetivo de evitar nuevas filtraciones de agua en el túnel. Asimismo, y de acuerdo con la normativa, antes de volver a abrir el túnel hay necesariamente que proteger la estructura frente al fuego, bien recolocando los paneles o bien con el mortero, dado que el derrumbamiento local de la estructura podría tener consecuencias catastróficas.
Es por ello que las obras de reparación del tramo de Pío XII podrían alargarse. El Ayuntamiento entiende que la mayoría de estas actuaciones las debería abonar ADIF, pero de momento no se ha llegado a un acuerdo. La próxima semana se realizará una reunión.
